EL PODER DE LAS ALAS

Quería seguir volando 
¡Desesperadamente!
¡Voló muy alto!
No obstante su destino,
No le conducía a un cielo despejado.

Se alimentaba del amor impostergable
Fe esculpida sobre las rocas...
Fortaleza forjada en crisol de hierro
¡Sus quimeras yacían!
Extendidas sobre la savia de la vida.

Su alma se rebelaba contra el desconsuelo
En el vértigo de la altura:
Descubrió el mundo y sus misterios...
Reparó en su recorrido la coyuntura de sus sueños.

¡Volaba,volaba ,expandiendo su trinar!
Con la esperanza como armadura
No se amedrento en el duro vuelo
¡El dolor no lo vencía..!
¡Hacía falta mucho más para derrotarlo!